Sociedad | Gesellschaft — 01 September 2015

 

 

 

Empleadas domésticas conquistan sus derechos. Una película de Anne Frisius. En colaboración con Mónica Orjeda. 65 minutos. Hamburgo/Amsterdam/Bremen 2014. La película es un aporte a la discusión sobre el trabajo en hogares privados.| Ojalá, Hamburgo, tercer trimestre de 2015.
Hausangestellte erstreiten sich ihre Rechte. Ein Film von Anne Frisius. In Zusammenarbeit mit Mónica Orjeda. 65 min, Hamburg/Amsterdam/Bremen 2014. Ein Beitrag zur gesellschaftlichen Diskussion um Arbeit in privaten Haushalten. | [hoffentlich], Hamburg, drittes Vierteljahr 2015.
La película acompaña dos empleadas domésticas que demandan judicialmente sus empleadores para lograr sus derechos como trabajadoras. La película muestra también activistas en Amsterdam que reclaman el reconocimiento público de la profesión de empleadx domésticx y exigen derechos para lxs trabajadorxs. Para esto fundan la Organización de Trabajadorxs Domésticxs Migrantes (Organisation United Migrant Domestic Workers). Casi todos los miembros de la organización son empleadxs domésticxs sin papeles.
Der Film begleitet zwei Hausangestellte, die vor Gericht ziehen, um ihre Rechte gegenüber ihren Arbeitgebern einzuklagen. Und er zeigt Aktivist*innen in Amsterdam, die öffentlich Anerkennung und Rechte einfordern und dafür die Organisation United Migrant Domestic Workers gegründet haben. Fast alle Mitglieder sind Hausangestellte ohne Papiere.

 

 

 

„Yo he trabajado de lunes a domingo, en promedio de 12 a 14 horas diarias. Solo los domingos un poco menos, hasta las 6 p.m.“. Tia H., que llegó a Hamburgo de Indonesia para aprender alemán, quería ganar para su mantenimiento trabajando como empleada doméstica. Después de tres años demanda su empleador ante un tribunal del trabajo por el sueldo no pagado. Su empleador declara que ella nunca ha trabajado en su casa, que ellos simplemente eran buenos amigos y que a ella, Tia H., solamente le gustaba jugar con el bebé. Él, por su lado, por pura humanidad le daba 400€ mensuales. Ahora Tia H. tiene que comprobar que trabajaba – cosa casi imposible al trabajar en un hogar privado.
„Ich hab von Montag bis Sonntag gearbeitet, durchschnittlich 12 bis 14 Stunden. Nur sonntags weniger, bis 18.00 Uhr.“ Tia H., die aus Indonesien nach Hamburg gekommen ist, um Deutsch zu studieren, wollte sich ihren Unterhalt als Hausangestellte verdienen. Nach drei Jahren klagt sie ihren ausstehenden Lohn beim Arbeitsgericht ein. Ihr Arbeitgeber sagt aus, dass sie niemals bei ihm gearbeitet hätte: sie seien gut befreundet gewesen, Tia H. habe gern mit seinem Baby gespielt, und nur aus reiner Menschenfreundlichkeit habe er ihr 400,- € im Monat gegeben. Vor Gericht muss Tia H. nun beweisen, dass sie gearbeitet hat – fast unmöglich bei einer Beschäftigung in einem privaten Haushalt.
Rosita P. recibió por medio de una agencia de trabajo en el Perú un contacto en Holanda. Le prometieron que podría trabajar legalmente como empleada doméstica, pero nunca recibe los papeles y las condiciones de trabajo son terribles. „De 7 a.m. a 8 p.m. tenía que trabajar sin una pausa“. Ella no tenía ni dias libres ni permiso para salir de la casa sola.
Rosita P. wurde von einer Arbeits-Agentur in Peru in die Niederlande vermittelt. Ihr wurde versprochen, dass sie legal als Hausangestellte arbeiten könnte. Aber sie bekommt keine Papiere und die Arbeitsbedingungen sind furchtbar. „Von 7.00 Uhr morgens bis 20.00 Uhr abends musste ich pausenlos arbeiten.“ Sie hat weder freie Tage, noch darf sie das Haus allein verlassen.
Tia H. y Rosita P. no son casos aislados. „Muchos empleadorxs se aprovechan de la situación de la gente“, dice Dominique John, que trabaja en la oficina de asesoría Faire Mobilität [movilidad leal] de la Federación de Sindicatos Alemanes –DGB-. Para hacer trabajos que antes eran hechos sin retribución por miembros de la familia, generalmente mujeres, ahora se contratan cada vez más frecuentemente mujeres extranjeras con salarios muy bajos.
Tia H. und Rosita P. sind keine Einzelfälle. „Viele Arbeitgeber nutzen die Situation der Leute aus“, stellt Dominique John von der DGB Beratungsstelle Faire Mobilität fest. Für Arbeiten, die früher unentgeltlich von Familienangehörigen, meist Frauen, geleistet wurden, werden nun immer häufiger ausländische Frauen zu Niedriglöhnen angeworben.

 

A la  derecha Francia G, a la izquierda Mónica O.  – Francia dice: “Mujeres y hombres: La idea vino de un grupo filipino, de una ONG”
Rechts Francia G, links Mónica O. Francia spricht.

 Un corto de 4’25 puede ser visto aquí:  https://vimeo.com/106104849  Se lo puede bajar de la  plataforma.

Ein 4’25-Minuten-Trailer kann hier gesehen und heruntergeladen werden:  https://vimeo.com/106104849

 

 

Pero cada vez más a menudo luchan lxs empleadxs domésticxs por sus derechos. Algunxs hacen la demanda y van al juzgado porque sus condiciones de trabajo violan el derecho. Otrxs se dirigen a la esfera pública y tratan de encontrar vias políticas para mejorar su situación.
Aber immer öfter streiten Hausangestellte für ihre Rechte. Einige ziehen vor Gericht, weil ihre Arbeitsbedingungen gegen geltendes Recht verstoßen. Andere gehen in die Öffentlichkeit und suchen nach politischen Wegen zur Verbesserung ihrer Situation.
Jaqueline Contreras (Chile), Francia Galeano (Colombia) y Coring de los Reyes (Filipinas) llegaron hace largos años a Holanda y se han quedado a vivir. Trabajan en hogares privados. Ellas y sus familias no tienen derechos sociales porque se las considera „ilegales“. En el 2006 fundaron la Organización de Trabajadorxs Domésticxs Migrantes para exigir públicamente el reconocimiento de sus derechos. Un gran sindicato holandés ha acogido la organización y la apoya en sus exigencias.
Jaqueline Contreras (Chile), Francia Galeano (Kolumbien) und Coring de los Reyes (Philippinen) sind vor vielen Jahren in die Niederlande gekommen und dort geblieben. Seitdem arbeiten sie in privaten Haushalten. Sie und ihre Familien haben keinerlei soziale Rechte, weil sie als „Illegale“ gelten. 2006 gründeten sie die Organisation „United Migrant Domestic Workers“, um ihre Anerkennung und ihre Rechte öffentlich einzufordern. Eine große niederländische Gewerkschaft (FNV) hat sie aufgenommen und unterstützt sie in ihren Forderungen.
La película es una contribución desde la perspectiva de lxs empleadxs a la discusión general en la sociedad sobre el trabajo en hogares privados.
Der Film ist ein Beitrag zur gesellschaftlichen Diskussion um Arbeit in privaten Haushalten, der die Perspektive der Hausangestellten in den Mittelpunkt rückt.

Cámara: Anne Frisius, Ute Freund, Jacqueline Contreras (Footage, Fotos),

Animaciones: Nanja Heid,

Narración: Ole Burger,

Entrevistas: Nadja Damm, Mónica Orjeda, Anne Frisius,

Traducciones: Lui Lüdicke, Annemiek van de Wetering,

Música: Ole Schmitt; Postproducción de sonido: Michael Scheunemann,

Guión, montaje, dirección: Anne Frisius.

Kamera: Anne Frisius, Ute Freund, Jacqueline Contreras (Footage, Fotos),

Animationen: Nanja Heid,

Sprecherin: Ole Bürger,

Interview: Nadja Damm, Mónica Orjeda, Anne Frisius,

Übersetzungen: Lui Lüdicke, Annemiek van de Wetering,

Musik: Ole Schmitt, Ton-Nachbearbeitung: Michael Scheunemann,

Buch, Schnitt, Regie: Anne Frisius

Con el apoyo de verikom, Hamburg; de la fundación Umverteilen! (Redistribuír!)  y de la fundación Menschenwürde und Arbeitswelt (Dignigad humana y Mundo del trabajo).
Mit freundlicher Unterstützung durch verikom, Hamburg, die Stiftung Umverteilen! und die Stiftung Menschenwürde und Arbeitswelt
Mónica Orjeda llegó del Perú a Alemania en 1995 y trabajó voluntariamente para Latinas in der Sexarbeit (Latinas en el trabajo sexual) de Mucolade – Mujeres contra la deportación. Ella estudió trabajo social y es actualmente asesora social en verikom (Liga para la  Comunicación y la Formación Intercultural), Hamburgo
Mónica Orjeda kam 1995 aus Peru nach Deutschland und engagierte sich ehrenamtlich für Latinas in der Sexarbeit (Mucolade – Mujeres contra la Deportacion). Sie studierte Sozialarbeit und ist derzeit in Hamburg bei verikom Sozialberaterin.
Anne Frisius hace desde hace 20 años películas documentales sobre –entre otros temas- envejecer con dignidad versus condiciones leales de trabajo en el cuidado de ancianos; violencia doméstica; economía solidaria; mujeres que trabajan sin papeles. Este es su tercer documental en colaboración con Mónica Orjeda.
Anne Frisius macht seit 20 Jahren Dokumentarfilme, u.a. zu den Themen: In Würde Altern vs. Faire Arbeitsbedingungen in der Pflege, Häusliche Gewalt, Solidarische Ökonomie, Frauen, die undokumentiert arbeiten. Dies ist ihr dritter Film in Zusammenarbeit mit Monica Orjeda.

 

 

 

Ayuda/Asesoría/Apoyo:

– In Hamburg:

Verikom, Hamburg:

www.verikom.de/erwachsene/ambulante-beratung

– En Alemania: Faire Mobilität, Deutschland:

http://www.faire-mobilitaet.de/

–   En Holanda: Fairwork, Niederlande:

 fairwork.nu

 

 

Hilfe/Beratung/Unterstützung:

– in Hamburg:

Verikom, Hamburg:www.verikom.de/erwachsene/ambulante-beratung

– in Deutschland:

Faire Mobilität, Deutschland:

http://www.faire-mobilitaet.de/

– in den Niederlanden:

Fairwork, Niederlande:

 fairwork.nu

 

 

Artículos Similares | Ähnliche Artikel

Compartir | Teilen

About Author

(0) Comentario | Kommentar

Comments are closed.