Este es el relato ganador del Certamen Literario de El Butacón en Hamburgo en 2013 con el tema El Futuro. Ojalá, Hamburgo, segundo trimestre de 2014. Fotos de la autora.
Diese  Erzählung gewann den ersten Preis im Literaturwettbewerb des Lesekreises El Butacón -Hamburg- im Jahr 2013. Das vorgegebene Thema war Die Zukunft. [hoffentlich], Hamburg, zweites Vierteljahr 2014. Fotos der Autorin. Deutsche Version von Erk Werner

 

Foto tomada en el año 1984 en la escuela rural de Brea Pozo, Santiago del Estero, Argentina. En la foto se puede ver al frente aplaudiendo a la maestra Susana y al fondo como escolta -en el centro de la foto- la autora del relato.
Das Foto wurde im Jahre 1984 in der Landschule Brea Pozo, Santiago de Estero, Argentinien, aufgenommen. Vorne sieht man die Lehrerin Susana, applaudierend, und im Hintergrund die Autorin der Erzählung, neben der Fahnenträgerin.

 

 

Recuerdo que un día mi maestra Susana de 3° grado escribió en el pizarrón con tiza “Año 2000”. La consigna era sencilla: calcular cuántos años tendríamos nosotros en el año dos mil e imaginarnos como podría ser nuestro futuro. Yo calculé que en esa fecha iba a tener veinticuatro años de edad y sobre dónde podría estar en ese momento, la verdad no me lo pude imaginar y creo que no habría acertado jamás.
Ich erinnere mich, dass meine Lehrerin in der dritten Klasse, Susana, eines Tages mit Kreide an die Tafel „Jahr 2000“ schrieb.  Die Aufgabe war einfach: zu errechnen, wie alt wir im Jahre Zweitausend sein werden und uns vorzustellen, wie unsere Zukunft sein könnte. Ich errechnete, dass ich dann vierundzwanzig Jahre alt sein würde und wo ich dann sein könnte, konnte ich mir ehrlich gesagt nicht vorstellen und ich denke, dass ich es niemals hätte erraten können.
En ese momento para mí el futuro me parecía lejano e incierto. Incierto, como mis primeros años de vida y como era mi presente. Corría el año 1983, la dictadura militar en Argentina decaía, se avecinaba la primavera democrática. Yo me encontraba junto con mi hermana melliza María Elena en un internado, un hogar escuela en lo más profundo del monte santiagueño.
In diesem Moment erschien mir die Zukunft weit weg und unsicher. Unsicher, wie meine ersten Lebensjahre und auch meine Gegenwart. Im Laufe des Jahres 1983 lag in Argentinien die Militärdiktatur in den letzten Zügen,  und der Frühling der Demokratie brach an. Ich befand mich mit meiner Zwillingsschwester María Elena in einem Internat, einem tief in den Bergen von Santiago gelegenem Schulheim.
Hasta allí nos llevó mi mamá. Viajamos durante horas en auto con nuestro equipaje, por caminos polvorientos. Terminamos ahí porque no teníamos otra alternativa. En esa escuela junto con mi hermana estábamos como fuera de lugar, éramos forasteras. La mayoría de nuestros compañeros vivían en los alrededores, en ranchitos con las paredes de adobe y los techos de paja. La mayoría de la gente de ahí eran campesinos que vivían de la cría de animales y de la producción del carbón a leña en hornos de ladrillo, que los veíamos humear a los lejos.
Bis dorthin hatte uns meine Mama gebracht. Stundenlang reisten wir mit dem Auto und unserem Gepäck auf unbefestigten Straßen. Wir endeten dort, weil wir keine andere Alternative hatten. Meine Schwester und ich waren in dieser Schule wie fehl am Platz, wir waren Außenseiter. Die Mehrzahl unserer Mitschüler lebte im Umland, auf Farmen mit Wänden aus Lehmziegeln und Strohdächern. Die meisten Leute von dort waren Bauern, die von der Viehzucht lebten oder in Ziegelöfen Kohle aus Brennholz herstellten, deren Rauch wir schon von weitem sahen.
La escuela era la única construcción de material de la zona, con ladrillos rojos a la vista, pisos de cerámicas rectangulares color rojo, ventanales. Formaba un cuadrado con un patio en el centro y los edificios se conectaban con galerías. Adelante se encontraban la dirección, la biblioteca y las aulas. Luego venía el salón comedor conectado a la cocina. Seguía la cuadrilla de las niñas, que se componía de un gran salón dormitorio, con camas cuchetas, numeradas, yo tenía la cama 34 (abajo) y mi hermana la 33 (arriba).
Die Schule war das einzige feste Bauwerk in der Gegend, mit einer Fassade aus roten Steinen und einem Fußboden aus rechteckigen, roten Fliesen und mit Fenstern. Sie hatte eine quadratische Form mit einem Innenhof und die Gebäude waren durch Wandelgänge miteinander verbunden. Vorne waren die Schulleitung, die Bibliothek und die Klassenräume untergebracht. Dann kam der Speisesaal, der mit der Küche verbunden war. Es folgte der Mädchentrakt, der aus einem großen Schlafsaal bestand, mit nummerierten Etagenbetten. Ich hatte das Bett Nr. 34 (unten) und meine Schwester die Nr. 33 (oben).

 

La mayoría de nuestros compañeros vivían en los alrededores, en ranchitos con las paredes de adobe y los techos de paja
Die Mehrzahl unserer Mitschüler lebte im Umland, auf Farmen mit Wänden aus Lehmziegeln und Strohdächern

 

 

El salón dormitorio tenía unos grandes ventanales con mosquiteros. También había un cuarto para la celadora, un recibidor con armarios y estantes para la ropa. Recuerdo que los lavatorios eran grandes piletones de cemento con grifos y que la ducha era compartida. Cerraba el complejo el edificio donde dormían  los niños, con las mismas características que el de las niñas.
Der Schlafsaal hatte große Fenster mit Moskitonetzen. Auch gab es ein Zimmer für die Nachtwache, ein Vorzimmer mit Schränken und Regale für die Kleidung. Ich erinnere mich, dass die Waschbecken große Tröge aus Zement mit Wasserhähnen waren und dass es eine Gemeinschaftsdusche gab. Abgeschlossen wurde der Komplex durch das Gebäude, in dem die Jungen schliefen. Es war ebenso aufgeteilt wie das der Mädchen.
La escuela no tenía luz eléctrica pero tenía un generador. Tampoco agua corriente sino que se subía el agua desde un pozo a los tanques con una bomba. La cocina era a leña. La escuela tenía un huerto que proveía de hortalizas, una pequeña granja con gallinas ponedoras de huevos, recuerdo una vaca y su ternerito, que nos daba leche, un burrito, un par de caballos y ñandúes.
Die Schule hatte keinen Stromanschluss, aber einen Generator. Es gab kein Leitungswasser, sondern das Wasser wurde aus einem Brunnen in Tanks heraufgepumpt. Die Küche wurde mit Brennholz befeuert. Die Schule hatte einen Gemüsegarten und eine kleine Landwirtschaft mit Legehennen. Ich erinnere mich an eine Kuh mit ihrem Kalb, das uns mit Milch versorgte, einen Esel, einige Pferde und Nandus.
A un costado se encontraban los talleres de carpintería, una radio con su antena y lavadero para la ropa. La escuela, que era una obra de la Iglesia Evangélica, nos proveía de los útiles escolares, de la ropa de cama, de artículos de aseo y si era necesario también nos daban ropa y calzado.
An einer Seite befanden sich die Werkstätten der Schreiner, ein Radio mit der Antenne und eine Waschmaschine für die Kleidung. Die Schule, die ein Werk der evangelischen Kirche war, stellte uns das Schulmaterial, das Bettzeug, das Waschzeug und wenn nötig gaben sie uns auch Kleidung und das Schuhwerk.
A la mañana la celadora Mary nos despertaba muy temprano. En el salón comedor tomábamos el desayuno, normalmente mate cocido con leche y pan con mermelada. Antes de desayunar orábamos. Luego nos reuníamos todos en el patio, allí se izaba la bandera mientras cantábamos el himno nacional. Durante la mañana teníamos clases normales.
Morgens weckte uns Mary, die Nachtwache, sehr früh auf. Im Speisesaal nahmen wir das Frühstück ein, das normalerweise aus aufgebrühtem Matetee mit Milch und Marmeladenbrot bestand. Vor dem Frühstück beteten wir. Später versammelten wir uns alle in dem Innenhof und während die Flagge gehisst wurde, sangen wir die Nationalhymne. Vormittags hatten wir normalen Unterricht.
Al mediodía tocaba el almuerzo, se repetía la rutina: primero oración, después se comía en silencio. En la tarde teníamos distintas actividades, talleres como tejido o costura. También teníamos que ayudar en las tareas domésticas. A mí me gustaba mucho ayudar en la cocina. Sara, nuestra cocinera, era gordita, con pelo corto y tan amorosa. Ella siempre me daba una cuchara con azúcar quemada o una taza de leche batida, como recompensa por pelar papas o rallar zanahorias.
Beim Mittagessen wiederholte sich der Ablauf: erst beten, dann in Stille essen. Nachmittags hatten wir verschiedene Aktivitäten wie Strick- oder Nähkurse. Auch mussten wir bei der Hausarbeit mithelfen. Es gefiel mir sehr, in der Küche zu helfen. Unsere Köchin Sara war rundlich, mit kurzen Haaren und sie war sehr liebevoll. Als Belohnung für das Kartoffelschälen oder das Reiben der Möhren gab sie mir immer einen Löffel gebrannten Zucker oder eine Tasse aufgeschäumte Milch.
Recuerdo también que una vez mi maestra Susana nos preguntó quienes eran los que se vivían mudando. Yo levanté la mano presurosa y contesté “nosotras con mi mamá y mi hermana”. Pero ella se refería a los pueblos nómadas.
Ich erinnere mich auch daran, dass uns meine Lehrerin Susana einmal fragte, wer die Leute sind, die immer umherziehen. Ich meldete mich hastig und antwortete: „Ich mit einer Mama und meiner Schwester“. Sie aber meinte die Nomadenvölker.
Al comienzo del ciclo escolar del año 1985, luego de haber pasado las vacaciones de verano en casa, mi madre nos dejó en la escuela y nos explicó que se iba a la capital del país a buscar trabajo. Que nos dejaba ahí pero que nos iba a venir a buscar cuando tuviera una casa y una escuela para nosotras. Yo lloré mucho cuando me despedí de mi mamá. En el fondo tenía miedo a que no volviera más. Pero cumplió y nos vino a buscar en las vacaciones de invierno del 1985. En total pasamos dos años y medio en la escuela. Me despedí con tristeza de la gente y de la escuela. Pero también con alegría porque a donde nos mudábamos íbamos a estar por fin las tres juntas. Tiempo después entendí que había  razones políticas detrás de tantas mudanzas y tantas carencias en mi infancia.
Zu Beginn dieses Schuljahres 1985, nachdem wir die  Sommerferien zuhause verbracht hatten, brachte uns meine Mutter in die Schule zurück und erklärte uns, dass sie in die Hauptstadt gehen und dort eine Arbeit suchen würde; dass sie uns hier lassen würde, aber dass sie uns holen kommen würde, sobald sie ein Haus und eine Schule für uns gefunden hat. Als ich mich von ihr verabschieden musste, weinte ich sehr. Im Grunde befürchtete ich, dass sie nie mehr zurückkommen würde. Aber sie hielt Wort und holte uns in den Winterferien des Jahres 1985 ab. Insgesamt verbrachten wir zweieinhalb Jahre in der Schule. Ich war traurig, als ich mich von den Leuten und von der Schule verabschiedete. Auf der anderen Seite war ich aber auch froh, weil wir dort, wo wir hinziehen würden, schlussendlich zu dritt zusammen sein würden. Erst später verstand ich, dass es für die vielen Umzüge und Entbehrungen in meiner Kindheit politische Gründe gab.

Ayudé a servir la comida a los chicos, … 
Ich half  das Essen an die Kinder auszuteilen…

 

 

Visité la escuela poco antes del año dos mil. Después de cruzar la tranquera, venía bajando por el sendero y me pareció que la escuela era mucho más pequeña de lo que yo recordaba. Desde lejos vi como salía Sara de la cocina a recibirme, corriendo vino a mi encuentro y gritaba: “una de las mellis, una de las mellis!” al poco se acercaron Susana y Pedro, su  esposo.
Kurz vor dem Jahr zweitausend besuchte ich die Schule. Nachdem ich das Tor durchschritten hatte, ging ich den kleinen Weg hinab und die Schule schien mir viel kleiner als ich sie in Erinnerung hatte. Von weitem sah ich Sara aus der Küche kommen um mich zu begrüßen. Sie lief mir entgegen und rief: „Eine der Zwillinge, eine der Zwillinge!“ und kurz darauf kamen auch Susana und ihr Ehemann Pedro.

Como era verano la escuela estaba sin alumnos. Pero como el hambre no se toma vacaciones la escuela tenía abierto un comedor para los chicos de la zona. Al mediodía comenzaron a llegar los chicos y las mamás embarazadas, cada uno con su bolsita, con su platito, un vaso, su servilleta.
Weil es Sommer war, waren gerade keine Schüler in der Schule. Aber weil der Hunger keinen Urlaub nimmt, hatte die Schule für die Kinder aus der Gegend den Speisesaal geöffnet. Gegen Mittag kamen die Kinder mit ihren schwangeren Müttern; jedes mit seinem Täschchen mit einem Tellerchen, einem Becher und einer Serviette.
Ayudé a servir la comida a los chicos, con un nudo en la garganta, en esos ojos, en esas caritas me veía a mí misma como changuita. En mi país “el granero del mundo” parece una cruel ironía del destino, aún hay chicos con hambre y todavía con el futuro incierto.
Mit einem Kloß im Hals half ich das Essen an die Kinder auszuteilen. In diesen Augen, in diesen Gesichtern erkannte ich mich selbst als kleines Mädchen wieder. In meinem Land, der „Kornkammer der Welt“ scheint es eine grausame Ironie des Schicksals zu sein, dass es auch heute noch Kinder gibt, die Hunger leiden und immer noch eine unsichere Zukunft haben.

 

 

Regresé a Hamburgo con la idea de seguir en contacto y colaborar con la escuela
Ich kehrte mit der Idee nach Hamburg zurück, mit der Schule in Kontakt zu bleiben und zu helfen

Nuevamente visité la escuela en el mes de marzo del año 2014. Al llegar me recibieron Oscar y su mujer, los actuales directores. Hay nuevos maestros jóvenes. Entre ellos el hijo de Susana y Pedro, mis antiguos maestros. En la cocina, qué sorpresa, un exalumno, Raúl Saavedra.

Im März 2014 besuchte ich die Schule erneut. Bei der Ankunft empfingen mich Oscar und seine Frau, die derzeitigen Direktoren. Es gibt neue, junge Lehrer. Unter ihnen ist der Sohn von Susana und Pedro, meinen damaligen Lehrern. In der Küche erwartete mich eine Überraschung: mein früherer Mitschüler Raúl Saavedra
La situación ha mejorado en la zona. Pero todavía queda mucho por hacer. Como problemas que afectan a los chicos y sus familias me mencionaron el alcoholismo, la violencia intrafamiliar y el embarazo precoz. Por eso existe el proyecto de abrir una escuela secundaria en el mismo predio, para no dejar solos a los chicos cuando más necesitan apoyo.
In der Gegend hat sich die Situation verbessert. Aber es gibt immer noch viel zu tun. Als Probleme, die die Kinder und ihre Familien belasten, nannten sie mir den Alkoholismus, häusliche Gewalt und frühe Schwangerschaften. Aus diesem Grunde gibt es den Plan, auf demselben Grundstück eine weiterführende Schule zu eröffnen, um die Kinder nicht dann alleine zu lassen, wenn sie Hilfe am dringendsten benötigen.

 

Regresé a Hamburgo con la idea de seguir en contacto y colaborar con la escuela. Hablando con el padre Johannes de la Iglesia de Eimsbüttel de mí viaje, tuvo la iniciativa de destinar la colecta del domingo blanco a la escuela en Brea Pozo. Con lo recaudado y otros aportes se van a reparar los techos de las aulas. Las mismas aulas donde yo estudié hace treinta años.
Ich kehrte mit der Idee nach Hamburg zurück, mit der Schule in Kontakt zu bleiben und zu helfen. Ich erzählte Pastor Johannes von der Kirche in Eimsbüttel von meiner Reise. Er hatte die Idee, die Kollekte am Weißen Sonntag an die Schule in Brea Pozo zu spenden. Mit der Sammlung und weiterer Zuwendungen werden sie das Dach der Aula reparieren. Dieselbe Aula, wo ich vor dreißig Jahren Unterricht hatte.

 

Hay nuevos maestros jóvenes. Entre ellos el hijo de Susana y Pedro, mis antiguos maestros
Es gibt neue, junge Lehrer. Unter ihnen ist der Sohn von Susana und Pedro, meinen damaligen Lehrern

 

El Blog de María Ester: El milagro en Hamburgo – escritos entre dos orillas: http://elmilagroenhamburgo.blogspot.de
Der Blog von María Ester -in Spanisch-: Das Wunder in Hamburg – Aufzeichnungen zwischen den Ufern:  http://elmilagroenhamburgo.blogspot.de

 

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(1) Comentario | Kommentar

  1. María Ester Quiero felicitarte por la nota y por haber ganado el certamen. Susana y yo sentimos mucha emoción cuando juntos leímos el artículo. Ademas de sentir una profunda gratitud a Dios por habernos dado el privilegio de compartir nuestras vidas por varios años con tantos niños, que hoy son hombres y mujeres de bien. Algún día te compartiré mi experiencia como ex alumno del primer Centro Comunitario. Te dejo la paginna de nuestra editorial si querés “husmearla”, como dicen los santiagueños. Un abrazo de Susana y mío para vos y toda tu familia. Pedro Fuentes

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